sábado, 29 de septiembre de 2007

PERDIDA en el azulejo

Chinche verde sin rumbo ni destino, Rosario, Argentina, setiembre de 2007.

4 comentarios:

. dijo...

Verdaderamente es un gran placer disfrutar observándoles, admirándoles sí.
¡Mágnifica trepada!
¡Qué adhesivos antideslizantes conformarán sus patas!
¿De veras crees que él o ella no tenía prefijado un rumbo fijo, un destino?
Casi con seguridad su objetivo está mucho más prefijado que el nuestro.
Unos besos :)

Anna Bahena dijo...

¿como sabes que no tenía destino?... y si a la vuelta de la esquina en la pared derecha,lo esparaba un silbido nocturno de viento?

bellisima..

Anna.

Unknown dijo...

No sé, yo creo que está pensando.

Anónimo dijo...

no sé yo lo único que pido es que no la maten nunca...